La construcción es una practica que afecta al cambio climático, destruye ecosistemas y emite contaminación constante. Es inevitable que contaminen ya que utiliza recursos naturales no renovables y emite gases como co2.

En nuestra vida tomamos una serie de decisiones que nos llevan a contaminar, de manera consciente o no, pero contaminamos, como el consumo de animales o comprar productos envasados. Un edificio consume alrededor del 40% de la energía de un país y emiten la mitad del co2.

La arquitectura es una herramienta que podemos utilizar para combatir el cambio climático y la contaminación, con el uso de energías limpias, paneles solares, separación de residuos, estaciones de carga para coches eléctricos o recolección de agua residuales para emplearlas en el riego.